"Os voy a contar lo más brevemente posible, el porqué un día tuve que consultar a Rosa de aspirante a gato, éramos una familia de Linco y Nata (gatos) y Tana y Colin (perros), la relación entre mi gato Linco y mi perra Tana era muy estrecha, jugaban, dormían y prácticamente eran el uno para el otro,  la cuestión llegó cuando falleció mi perra Tana de tumores en la médula y mi gato Linco, no entendía que ya no entrara por la puerta Tana, se ponía encima del carro donde los últimos meses llevábamos a Tana al parque, porque no podía mover sus patitas de atrás, y maullaba y lloraba, se iba a la puerta de entrada y empezaba a chillar, si digo chillar porque el maullido era ensordecedor, Linco no entendía porque un día salió y no volvió a entrar, a todo esto me di cuenta de que dejó de comer y beber, por lo que le daba agua y comida con jeringa, 2 meses antes de fallecer Tana, trajimos a casa a Nata una gatita negra cariñosa y preciosa, que creí que le iría bien a Linco cuando faltara Tana, pues mientras estuvo Tana y Nata todo perfecto a la que faltó Tana, le bufaba a ella y a nosotros, no quería saber nada de la vida, Linco nos hacía entender que quería que buscáramos a Tana, pero yo no sabía como explicarle que ya no volvería más, así que consulté con Rosa, cuando mi veterinaria me dijo que el gato se estaba dejando morir, gracias a las pautas y las flores de Bach, mi gato sobrevivió, y eso me dió experiencia para cuando se murió Colin y mi Nata también paso el duelo volver a repetir las pautas y las flores de Bach, gracias a esto mis gatos están vivos, porque si no ya no estarían con nosotros. "

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Mónica de Linco, Nata, Tana y Colin